con los procesos decimonónicos del Resurgimento que conducirán a la
unificación política de un paisaje cultural y lingüístico que continuará, hasta
nuestros días, presentando rasgos de heterogeneidad.
Además de la propuesta metodológica y del marco epistemológico que
provee el De Mauro de la Storia linguistica dell´Italia unita, el volumen retoma
uno de los conceptos teóricos más importantes planteado por el lingüista
italiano, esta vez en su Guía al uso de las palabras. Nos referimos al concepto
de “espacio lingüístico”, considerado como un esquema que, a partir de las
sugestiones del Wittgenstein de las Investigaciones filosóficas, se centra en la
idea de “competencia lingüística individual y que, desde nuestro punto de vista,
logra dar cuenta de los hechos colectivos, sociales, y por eso se transforma en
un modelo de la configuración idiomática italiana”. Concebida como “espacio
lingüístico”, Italia se presenta como un todo heterogéneo: como un “conjunto
complejo de realidades idiomáticas” que van de los dialectos y del italiano
nacional a las lenguas de las minorías históricas -albanesas, alemanas,
eslavas, griegas- así como a las “lenguas inmigratorias” de quienes adoptan a
Italia como lugar de residencia, etc.
Se trata de un concepto, el de “espacio lingüístico”, lo suficientemente
lábil como para ser adoptado como fundamento epistemológico de la historia
lingüística de la inmigración. Para ello, el concepto de De Mauro exige ser
precisado y complejizado. Vedovelli y su equipo lo amplían de tal modo que
permita pensar un espacio global, que crea “nuevos territorios de contacto
entre el italiano y su espacio lingüístico, por un lado, las otras lenguas y los
espacios lingüísticos en los cuales se hallan presentes también las
comunidades de inmigrantes italianos, por el otro” (141). En otras palabras, es
necesario, desde la perspectiva de Vedovelli y su equipo, pensar al italiano en
un espacio heterogéneo en el que los diferentes registros y las distintas formas
dialectales conviven de manera conflictiva con otras variables nacionales y
regionales: como un espacio en el que los fenómenos inmigratorios que
atraviesan la realidad histórica italiana cumplen un rol central.
En el caso de la investigación nucleada en torno a la Storia linguistica
dell´emigrazione, Vedovelli y el grupo de especialistas que coordina plantean
una serie de criterios de explicación de las relaciones entre la población italiana