Argento de Cristina Piffer

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Pestarino, J. (2019). Argento de Cristina Piffer. Estudios Curatoriales. Recuperado a partir de http://revistas.untref.edu.ar/index.php/rec/article/view/752

Exposición:
Argento de Cristina Piffer
Curador:
Fernando Davis
Galería Rolf Art, Buenos Aires
Del 16 de agosto hasta el 12 de octubre de 2018

 

En 1878 Estanislao Zeballos, abogado, naturalista, etnólogo, geógrafo y poseedor de una larga lista de títulos y funciones diversas, publicó el libro La conquista de quince mil leguas, escrito a pedido del general Julio Argentino Roca con la finalidad de convencer a los miembros del Congreso de la Nación Argentina de financiar la llamada “Conquista del Desierto”. Pocos años más tarde, tras un viaje por el norte de la Patagonia, Zeballos reunió sus observaciones en su obra más conocida Viaje al País de los Araucanos (1881) en donde escribiría la frase “La Barbarie está maldita y no quedarán en el desierto ni los despojos de sus muertos”.

137 años después las primeras cuatro palabras de esta sentencia, producto de la lógica racista de entonces bajo la cual se expandían las fronteras de Argentina a sangre y fuego, se encuentran grabadas en un bloque de grasa exhibido en una galería en el barrio de Retiro. Esta pieza blanca y sutil, suave pero punzante, forma parte de la muestra Argento de Cristina Piffer, que actualmente tiene lugar en la galería Rolf. La exhibición reúne un conjunto de obras de diversas series producidas por la artista entre 2002 y 2018 con un denominador común: en todas ellas se revisita la historia argentina y se abordan episodios atravesados por la explotación y matanza de diversas comunidades originarias por parte de pudientes sectores terratenientes y gubernamentales.

El espacio que ofrece Rolf es un pulcro cubo blanco en donde las obras se exhiben en una extrema prolijidad bajo una iluminación profusa, casi de quirófano, que refuerza la sensación general de asepsia del espacio. Esta característica complementa a la perfección la obra de Piffer, abonando el dual efecto que genera en uno el adentrarse a su trabajo. Las líneas y los tonos de todas las piezas que componen la muestra permanecen en el espacio con una homogénea distribución, sin desentonar y sin resaltar ninguna especialmente. Sin embargo, al acercarnos a cada una de ellas y observar sus materiales, leer su título y su breve descripción, la sensación que nos generan es de un horror siniestro, en términos freudianos.

Todo argentino que visite Argento será interpelado, ya que la mayoría de las regiones geográficas del país se encuentran representadas por algún drama, tragedia o abuso ejercido directamente sobre sus pobladores originarios. La llamada “Conquista del Desierto” está representada en la frase labrada sobre grasa ya nombrada y en obras como 41 millones de hectáreas (2010), en la cual Piffer graba en polvo de sangre animal esta cifra de territorio “ganado” a las diversas comunidades de la regiones pampeana y patagónica. Otro bloque de grasa y parafina proclama “cultivar el suelo es servir a la patria”, citando al lema que menta la Sociedad Rural Argentina desde sus inicios, a mediados de la década de 1860, y estableciendo automáticamente una relación a través de la formalidad de estas obras entre la “Conquista del Desierto” y el supuesto inevitable destino argentino de productor agropecuario a base de matanzas. En relación a este tópico Piffer ha trabajado durante su carrera diversas series, como SRA (2003) y Neocolonial (2002-2018), esta última representada en Rolf por un damero de baldosas de grasa y carne vacuna contenida en acrílico y resina. Matambre similar al mármol, presentado en prolijos cuadrados brillantes que de lejos cautiva y de cerca impresiona por todas las alegorías que, con sólo mirarlo en detalle, podemos imaginar. ¿Fueron vacas, fueron humanos? ¿Cuántas personas murieron para que, desde entonces, un puñado de terratenientes posean aquellos infinitos territorios?

El nombre de la muestra deriva de la obra Argento. 300 actas (2017), desarrollada a partir de actas de bautismos de indígenas recluidos como prisioneros en la isla Martín García durante el período 1870-1890. Desde allí eran repartidos a diversos destinos para ser utilizados como fuerza de trabajo en actividades productivas o en el servicio doméstico, y como soldados o marinos en el Ejército o la Armada (Nagy y Papazian, 2011). Piffer rescató del olvido estas actas archivadas en el Arzobispado de Buenos Aires para reproducirlas sobre pulidas y finas placas de metal que, tras haber sido exhibidas en formato horizontal sobre una larga mesada durante la primera edición de BIENALSUR en el Centro Cultural Haroldo Conti en 2017, tomaron forma de gran espejo fragmentado al ser mostradas ahora en Rolf sobre una superficie vertical.

Ubicados en paralelo a la vidriera de la galería, miran hacia el exterior una hilera de retratos reproducidos sobre vidrios, conformando la reciente serie Braceros (2018). Cada uno compuesto por frente y perfil, encontramos diáfanos retratos de indígenas de la región del Gran Chaco obligados a trabajar en el ingenio La Esperanza, provincia de Jujuy. Fotografiados con fines científicos en el marco de los estudios antropométricos bajo el paradigma dominante de principios de siglo XX de la antropología física, sus imágenes se encuentran actualmente conservadas en el Archivo fotográfico del Museo de La Plata. Nada es casual en la historia argentina ni en la obra de Piffer: la fecha de fundación del museo coincide con la campaña militar de “pacificación” del Chaco y los inicios de la industria azucarera, que tendría en la mano de obra de los indígenas chaqueños la base de su rentabilidad (Martínez, 2010).

En este punto del recorrido de la muestra nos preguntamos, ¿es posible generar belleza a partir de estos sucesos? ¿Es necesario revisitar el pasado mediante obras expuestas a la venta en un espacio selecto del mercado del arte de nuestra ciudad? Como afirma Allan Sekula, en las obras del arte socialmente comprometido existe el riesgo de ser devorado por la gigantesca maquinaria de la reificación material y simbólica. La ironía política se mueve por una delgada línea entre la resistencia y la rendición (2004 [1978]: 54). Las exhibiciones en galerías de arte redoblan esa dual condición, ya que si bien su propósito final es vender obras, se conforman como un espacio exhibitivo gratuito y abierto a todo público. Creemos entonces, respondiendo al anterior interrogante, que sí es necesario, ya que las obras de Piffer replantean sucesos del pasado para que nos preguntemos cuál es el estado de las cosas en el presente.

Los miembros de comunidades originarias sobrevivientes a las sucesivas campañas de conquista fueron tratados como parte del territorio y se constituyeron en objeto de análisis y de observación. Sus cuerpos y sus restos óseos pasaron a estar también bajo la soberanía de la nación (Martínez, 2010); cuidadosamente registrados, cual colección de objetos preciados, en el Catálogo de la Sección Antropológica del Museo de La Plata. Esta reificación invisibilizada toma presencia en la muestra de Rolf a través de la sutil impresión mediante grasa sobre papel de entradas de aquel Catálogo en la serie Inventario (2018).

Uno de los peligros más grandes de reproducir sólo la historia contada por los vencedores es permitir olvidar, en el caso de las obras aquí citadas, que estas comunidades aún existen y habitan diversas regiones de Argentina. La Comunidad Mapuche Tehuelche Nahuelpan reclamó durante años al Museo de La Plata la restitución de los restos de su lonko Inacayal, confinado en el Museo como pieza viviente primero y como material de estudio y exhibición después. En 1994 ya se habían restituido sus restos óseos siendo ésta la primera restitución de restos humanos ordenada por ley, pero recién en 2014 la restitución se completó devolviendo también su cerebro y cuero cabelludo junto a los restos de su esposa. Este es sólo uno de los ejemplos que vale la pena citar, pues de cada uno de los temas de las obras que componen Argento podemos seguir un hilo que nos conduce invariablemente a conflictos del presente. Por eso mismo es necesario visitarla.

Fotografías de Matías Quintana.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  • Endere, María Luz, “Cacique Inakayal. La primera restitución de restos humanos ordenada por ley”, Corpus, Vol 1, Nº1, 2011.
  • Martínez, Alejandro Raúl. Imágenes fotográficas sobre pueblos indígenas: un enfoque antropológico. La Plata: Universidad Nacional de La Plata, 2012.
  • Nagy, Mariano y Papazian,Alexis, “El campo de concentración de Martín García.
  • Entre el control estatal dentro de la isla y las prácticas de distribución de indígenas (1871-1886)”, Corpus, Vol 1, Nº2, 2011.
  • Sekula, Allan, “Desmantelar la modernidad, reinventar el documental. Notas sobre la política de la representación” [1978], en Ribalta, Jorge (ed.), Efecto real. Debates posmodernos sobre fotografía, Barcelona, Gustavo Gili, 2004, pp. 35-63.

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