Resumen
En este artículo el objetivo es problematizar, desde el campo curatorial, el uso de materiales orgánicos en obras de arte y proyectos –como en la exposición 45 cuerpos de la artista mexicana Teresa Margolles– para crear imágenes con la fuerza para potenciar el discurso político de lo efímero, lo evanescente y lo transitorio en espacios museales y en el campo del arte en general. Para ello, primero realizaremos una introducción que versa sobre la potencialidad de la materia orgánica en el arte contemporáneo; en segundo lugar, describiremos el caso de la exposición mencionada, que incorpora los hilos de sutura de los cuer-pos violentados en su puesta museal y curatorial, y finalmente analizaremos la importancia del discurso curatorial para repensar las prácticas artísticas y visua-les que podrían trastocar el modo de operar y funcionar del campo curatorial la-tinoamericano.