La investigación analiza instalaciones de arte interactivo realizadas en Argentina, entre los años 2010 y 2020. Un período histórico caracterizado no sólo por los cambios sociopolíticos y el inédito contexto de la pandemia del COVID-19, sino por los avances significativos que comenzaron a producirse dentro del ámbito institucional del arte. El corpus de obras está conformado por: Ahora. Una canción en la superficie hipertemporal de Mene Savasta Alsina y Hernán Kerlleñevich, Sin título de Alejandro Schianchi, Ejercicios de demora de Leonardo Solaas, Espero recordarlo todo de Ivana Nebuloni e Impresiones Sonoras de Ana Villanueva. Las instalaciones interactivas proponen una experiencia sensible al modificar la percepción del tiempo y del espacio a partir de la manipulación de archivos sonoros y visuales, por lo que el objetivo principal de la Tesis de Maestría fue analizar cómo opera la mediación institucional y el rol que ejercen los curadores, como instancia final de dislocación y disputa del sentido de las obras.
Frente al reto de investigar piezas realizadas recientemente, en el primer capítulo se asumió el desafío de hablar sobre la contemporaneidad desde una perspectiva filosófica, sociológica e historiográfica, con el propósito de identificar el lugar que le otorga la historiografía del arte a las Artes Electrónicas, en particular dentro de la escena local. Se intentó dilucidar qué relación establecen con el tiempo en el cual emergen, las múltiples temporalidades que habitan en los archivos que emplean y generan como insumo así como, las dimensiones políticas que les inscriben y reescriben las diferentes instancias de interacción, mediación y legitimación institucional. Se evidenció que los artistas no persiguen la reposición o reparación de la memoria histórica colectiva en sus planteos conceptuales. Al realizar una operatoria de descontextualización y recontextualización, añaden elementos críticos, subjetivos y/o de valoración sobre los archivos que emplean o generan, logrando cuestionar su ontología.
En el segundo capítulo, se identificó qué clase de interfaz tecno-política establecen las piezas dentro de un período en el que desde el Estado se dio inicio a un redireccionamiento hacia imaginarios tecno-modernizadores. Las obras presentan ciertas filiaciones y diferencias en relación a la dirección hegemónica tecnológica. Por un lado, las instalaciones vinculan los archivos con mecanismos de autonomía, control y vigilancia y, por el otro, proponen desaprender ciertos usos hegemónicos asociados al manejo de los dispositivos tecnológicos, trascendiendo la dicotomía entre alta y baja tecnología y amalgamando lo analógico con lo digital.
Por otra parte, si bien han sido legitimadas en premios internacionales y concursos y salones nacionales participan solo de exhibiciones temporales, por lo que en el tercer capítulo se analizó cómo la mediación institucional es clave para dar lugar a la emergencia de nuevas genealogías e inscripciones, atentas a la puesta en diálogo con las disciplinas tradicionales así como a los desafíos que se presentan en cada montaje. Se examinaron casos de restauración o migración de formato de obras nativas digitales exhibidas en sala, sin por ello ser descontextualizadas o forzadas a una formulación objetual. Asimismo, dentro de un contexto en el que la mediatización se ha expandido a todos los campos sociales, incluido el del Arte, se analizaron exhibiciones virtuales con el objetivo de identificar diferentes formas de mediación y modos de organización de lo sensible que ponen en crisis la idea de pertenencia y autonomía.
La investigación evidenció las filiaciones y fricciones que establecen las instalaciones interactivas dentro del ámbito institucional y el espacio de datos. Lo inasible de la combinación aleatoria que resulta de la interacción con los archivos y las reconfiguraciones de formato que se suscitan en cada montaje, demanda poder archivar lo procesual, ya que esto supone un desafío historiográfico que excede a la instancia expositiva. En medio de disputas de sentidos, un aumento progresivo de montajes virtuales y exhibiciones de marcado carácter inmersivo, parece haber llegado el momento de comenzar a teorizar sobre la temporalidad de estas poéticas electrónicas, exhibir la materialidad de la dimensión digital y establecer relaciones conciliadoras que revaloricen la presencia física o virtual del sujeto como reguladora de la experiencia artística.
*Tesis de Maestría en Curaduría en Artes Visuales, Universidad Nacional de Tres de Febrero. Buenos Aires, Argentina.
Disponible en Biblioteca de UNTREF