Resumen
Este artículo se propone revisitar una experiencia de trabajo de campo con perpetradores argentinos juzgados por crímenes de lesa humanidad, llevada a cabo entre 2015 y 2017. La mayoría de los oficiales retirados fueron entrevistados cuando estaban detenidos en cárceles comunes, eran objeto de condena social generalizada, y ya no ocupaban una posición de poder. Consiguientemente, se apunta a reflexionar cómo incidieron estas condiciones particulares en las dinámicas de poder entre los entrevistados y la investigadora, en el tipo de datos recabados y en la producción de conocimiento. Complementariamente, se reponen algunas emociones personales que emergieron en la interacción con los entrevistados, al tratarse de un aspecto que incidió activamente en el curso de la investigación.

