CARTA DEL DIRECTOR
ESTE NUMERO DE CIUDADANIAS entra en circulación en circunstancias que preocupan seriamente a importantes sectores de la ciudadanía, alertada por las amenazas al funcionamiento del sistema universitario público y gratuito como consecuencia de las medidas de recorte presupuestario para el financiamiento del personal docente y no docente decididas por el poder ejecutivo.
Si bien se pretende justificar los recortes con un discurso de búsqueda de eficiencia y control del supuesto despilfarro en el manejo presupuestal de los recursos que realizarían las instituciones universitarias, lo que no puede ocultar es la intención de terminar con el pluralismo de la libre expresión y el debate de ideas, que desconoce el pensamiento dogmático de la verdad revelada, y poner fin al compromiso de la institución con el destino de las mayorías populares.
La ofensiva descalificadora es particularmente gravosa para todos los que trabajamos en el campo de las políticas públicas, con la vocación de hacer realidad los principios de la justicia social, a la que el gobierno define como un robo, y como delincuentes a sus mentores y practicantes.
Se trata de una ofensiva que encuentra sentido en el marco de la “batalla cultural” en que se encuentran empeñados el gobierno y sus ideólogos, con el declarado propósito de desterrar la “cultura marxista” y las “ideologías de género” a las que atribuyen la responsabilidad del fracaso social y económico del país y, tendrían en las universidades públicas sus principales usinas de producción y difusión.
Por esa razón para los cultores de la verdad revelada la batalla por la “recuperación de la universidad” asume una importancia estratégica, porque, según lo manifestaron abiertamente, se trata de una condición necesaria para “garantizar un futuro libertario” en la sociedad y la economía y segar las fuentes de la “decadencia estatista y socialista” que habría “envenenado” la vida del país en las últimas décadas. Para lograr esos propósitos no se vacila en recurrir a la difamación y al desprestigio del trabajo universitario y del sistema científico en general, con acusaciones de inutilidad y despilfarro de recursos que justificarían el ahogo presupuestario que se pretende aplicar.
A contramano de ese discurso, las extraordinarias manifestaciones que se produjeron en todo el país en defensa de la universidad pública y gratuita, en las que participaron sin distinción representantes de todas las clases sociales y todas las edades, expresaron con claridad el prestigio y valoración social del que gozan las instituciones universitarias, que las coloca por encima de la mayoría de instituciones del país. Como lo destaca un comunicado del Consejo Interuniversitario;
“La sociedad argentina tiene una alta valoración de sus universidades públicas a lo largo y a lo ancho del país, no solo por su tarea de formación de hombres, mujeres, diversidades y personas con discapacidad integras con alta capacidad profesional, sino también por su tarea en la construcción del conocimiento, por la transferencia al mundo de la producción y del trabajo, a la sociedad en general, por las tareas de extensión y la solidaridad con los sectores más postergados”.
En ese marco el equipo editor de CIUDADANIAS reitera su compromiso de seguir insistiendo en difundir los aportes y debates de los investigadores y especialistas del sistema científico universitario, que con distintos enfoques y disciplinas trabajan por lograr la justicia social como condición necesaria para la construcción de una sociedad más justa en un mundo mejor.
Con esa perspectiva convocamos a nuestros lectores y lectoras, y a todos y todas las integrantes de la comunidad académica, a mantenernos alertas en defensa de la universidad y los valores que le dan sentido, como expresión de una causa justa que nos compromete a continuar una lucha que amenaza prolongarse en el tiempo.
Jorge Carpio
Director.
Editorial
De forma persistente, América Latina resulta la región más urbanizada a la vez que la más desigual del planeta. Como apuntamos en la convocatoria de este número de la revista, esta afirmación tiene como telón de fondo hondas distancias sociales entre grupos sociales en las formas de ocupar el espacio, dando lugar a profundos “déficits urbanos” como la precariedad habitacional (asentamientos, villas o tugurios), la informalidad en la tenencia, la falta de cobertura de servicios básicos y su mala calidad, las deficiencias en el transporte, o la escasez de espacios públicos, entre algunas de las dimensiones centrales que históricamente han constituido objeto de reflexión.
El dosier que organiza este número de la revista Ciudadanías, está dedicado a la cuestión urbana y el derecho al territorio como objeto de indagación y espacio de confrontación. El mismo está coordinado por el Doctor Pedro Pírez (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas - Universidad de Buenos Aires - Universidad Nacional de Tres de Febrero) de larga y extensa trayectoria en la materia, y reúne una serie de contribuciones de especialistas que dan cuenta cómo las ciencias sociales están abordando la temática involucrando diversas dimensiones y perspectivas. De esta forma, el dosier constituye un esfuerzo por articular un conjunto de miradas críticas sobre el lugar que ocupa esta problemática en las agendas académicas y de políticas públicas, como así también de las tensiones y conflictos que las recorren y moldean.
A ello se adicionan un número de artículos libres que se suman a la convocatoria luego de pasar por el proceso de evaluación de pares, que enriquecen con sus contribuciones el debate que presenta el dosier.
El número se completa con la reseña a cargo de Doctora Cristina Cravino (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas /Instituto de Cultura, Sociedad y estado-Universidad nacional de Tierra de Fuego) del libro Las políticas neoliberales y la ciudad en América Latina compilado por Pedro Pírez y María Carla Rodríguez, donde diferentes autores y autoras reponen y renuevan reflexiones de indudable centralidad en nuestras sociedades latinoamericanas.
Desde el equipo editorial se agradece muy especialmente a Pedro Pírez como organizador del dosier, y a todas y todos los autores que componen este número por sus contribuciones. Así también, agradecemos a las y los evaluadores y colaboradores que participaron de diferentes formas en esta oportunidad.
Patricia Davolos
Coordinadora del Equipo Editorial